Quienes somos

El 13 de abril de 1917, se funda en la Ciudad de Comitán de Domínguez, Chiapas, la Casa Santa Rosa de Viterbo o Casa del Niño Jesús Fundador (así la conocen las personas de Comitán y sus alrededores). El 19 de abril de 1917 se inician las labores en el Hospital conocido como Casa de Salud.

En 1925 se estableció canónicamente la casa “Santa Rosa de Viterbo” Casa de Salud, al servicio de los más necesitados. Aunque se fundó en 1917 en circunstancias especiales de la diócesis por el Sr. Obispo Gerardo Anaya Y Díez de Bonilla, sin embargo, el decreto se entregó en el año 1940.

En el año de 1928 debido a la persecución religiosa, las hermanas fueron enclaustradas y refugiadas en la Embajada de Guatemala. En 1929 las hermanas retoman sus actividades y motivadas por algunos bienhechores compran una casa y en 1930 siguen atendiendo la Casa de la Salud en Comitán de Domínguez, Chiapas.

El 20 de octubre de 1944, la madre Mercedes Martin del Campo se presento a recoger la imagen del niño fundador que había mandado a hacer y el escultor muy triste le comento que la noche anterior habían entrado a asaltar y se habían llevado todas las imágenes que ya estaban realizadas, sin embargo la madre Mercedes muy tranquila le respondió: ¡Mi niño no se va con nadie! Y se puso a revisar todas las cajas vacías del local, para al final encontrarla  en una de ellas, tal y como ella lo dijo, la imagen del niño estaba ahí.

El Niño Fundador llego a Comitán, procedente del Estado de Puebla el 21 de octubre de 1944 y por este dato y el milagro antes citado, la fiesta en su honor se celebra el 21 de octubre en esta ciudad, aunque la Congregación lo celebra el 22 de octubre de cada año ya que es el aniversario de la última aparición a la Madre Clarita.

Desde el año de 1944  ha iluminado con su presencia en esta ciudad de Comitán de Domínguez, donde se le quiere mucho y tenemos el orgullo de decir que es Comiteco; pues además han ocurrido hechos que avalan la protección del Niño Fundador sobre este pueblo, que le venera con el corazón y una muestra de ello es cuando en mayo del año de 1946 una racha de fuertes vientos levantaron techos, muebles y hasta animales, pero gracias a Dios en el Barrio de San Sebastián, no hubo nada que lamentar, motivo por el cual la gente empezó a visitar su Capilla para encomendarse a él y pedirle que los librara de ese mal que se cernía sobre Comitán.

Desde el 2018 deja de ser únicamente Capilla de oración, y se integra la Estancia para ancianas “Niño Jesús Fundador”, con la finalidad de atender la salud y bienestar de las Madres Mayores y enfermas, quienes además continúan ejerciendo su apostolado, acompañando a las personas que buscan una palabra de aliento, un consejo o dirección espiritual, orando por quienes se encomiendan a sus oraciones y por las necesidades de la Congregación y de la Iglesia, también apoyando la pastoral parroquial, dando inicio así a una nueva etapa de la Casa “Niño Jesús Fundador”.